viernes, 7 de diciembre de 2007

AMBIENTE DE APRENDIZAJE PARA EL DESARROLLO Y LA MEJORA DE LAS HABILIDADES MOTRICESN BÁSICAS.

1. Introducción.

Un ambiente de aprendizaje se puede definir como un lugar, no solo físico sino también social y afectivo, en el que se puede se crean unas condiciones “óptimas” para desarrollar de forma adecuada un proceso de enseñanza-aprendizaje. Para ello, y hablando desde el ámbito de la educación física, la fisonomía de ese espacio tiene que tener un carácter global, inespecífico, con una gran potencialidad de desarrollar una o varias capacidades o habilidades físicas y ofreciendo siempre la mayor variabilidad posible en cuanto a formas, contenidos, modos de juego, no siendo necesario para conseguir esto utilizar una gran cantidad de materiales o elementos especialmente “tecnológicos”. El acondicionamiento del espacio va a depender del tipo de aprendizaje que queramos llevar a cabo, de modos que debemos de elegir de forma concienzuda los objetivos que queremos desarrollar y en función de estos elegiremos los materiales y tareas más adecuadas para su desarrollo.

Normalmente, con este tipo de herramientas lo que perseguimos es que el alumno actúe “libremente” de forma que vivencie todo tipo de experiencias posibles, que realice lo que crea oportuno en cada momento para que se vaya descubriendo a sí mismo, conociéndose a través de su propia experiencia y vaya viendo cuales son sus posibilidades, a la vez que se divierte y disfruta y lo más importante, a la vez que realiza actividad física.

Debido a lo expuesto anteriormente, se aplica una estrategia de enseñanza global pura ya que el niño se mueve y realiza los movimientos o actividades que desea y como las desea, mientras que la técnica de enseñanza que se lleva a cabo es la indagación, la libre exploración: cada niño por su propia experiencia o por su propio aprendizaje de ensayo-error irá descubriendo que puede hacer con cada uno de los materiales que hay en la sala y a medida que los vaya conociendo y viendo las posibilidades que ofrece cada uno podrá ir modificando su percepción del material y de su utilidad.


2. Creación del ambiente de aprendizaje.

Particularmente, con el espacio que voy a crear pretendo que los sujetos desarrollen y mejores todas las habilidades motrices básicas: desplazamientos, saltos, giros, lanzamientos, recepciones; además de otras capacidades como el equilibrio, la coordinación, el ritmo, etc. Para esto último, además de todos los elementos que se detallan a continuación se dispondrá de un soporte musical para que los sujetos puedan realizar otro tipo de actividades como pueden ser el baile, ejercicios con ritmo, expresión corporal o cualquier otra actividad que requiera de este elemento.


3. Descripción de los elementos que aparecen en el “ambiente de aprendizaje”

A continuación se hará una descripción de todos los materiales dispuestos para la confección de un espacio de aprendizaje seguido de breve explicación sobre cual es su utilidad y que es lo que perseguimos con dicho material. Cada material tiene asignado un número para que sea más fácil su localización dentro del espacio. A veces los materiales no tienen un lugar fijo y aunque aparezcan en el gráfico en un lugar luego durante el desarrollo de la sesión estos pueden desplazarse por todo el espacio.

1. Sacos: como ya sabemos, este material se utiliza fundamentalmente para introducirse dentro y realizar saltos, carreras de sacos, etc. Estas actividades nos van a ayuda a que el niño mejore su coordinación, puede ayudar también a desarrollar la musculatura de las piernas produciendo una mejora de la capacidad de salto. Por otro lado, también puede ser un buen elemento para el desarrollo del equilibrio ya que saltar con los dos pies juntos dentro de un saco puede hacer que el niño se desequilibre una que otra vez y el hecho de tener que volver a equilibrarse hace que vaya mejorando dicha capacidad.

2. “El teje”: “El teje” es un juego tradicional también llamado el pique o la tanga que consiste en ir tirando una piedra o similar (en este caso hemos utilizado un ringo) en cada casilla de forma sucesiva hasta llegar al último número. Primero se lanza al número uno, se hace todo el recorrido con un solo pie y a la vuelta se recoge y si se ha hecho correctamente se pasa al número siguiente. Este tipo de juegos tiene los mismos beneficios que el juego anterior lo que ocurre que aquí se añade el hecho de tener que lanzar un objeto con un objetivo concreto: introducirlo dentro de un cuadro, lo cual ayuda a mejorar los lanzamientos de precisión. Además, por el propio desarrollo del juego ayuda también a mejorar la lateralidad del sujeto, la coordinación, el equilibrio unimodal entre otros aspectos.

3. Bancos: se colocan 4 ó 5 bancos a uno 50 centímetros cada uno (como aparece en el dibujo). Alrededor se colocan colchonetas para evitar caídas aparatosas. En este lugar los alumnos puede realiza varias acciones. La primera de ellas puede ser pasar mediante reptaciones por debajo de todos los bancos, con lo cual estarían realizando una forma de desplazamiento. Otra tarea que pueden realizar es la de pasar por encima de un banco, de un extremo a otro, con lo cual estarían mejorando el equilibrio. Después de cruzar el banco podrían saltar a las colchonetas con lo que estarían practicando también las caídas. Por último, podrían pasar saltando de un banco a otro, desde el primero hasta el último. Con esta actividad estarían mejorando el salto, los desplazamientos, la estabilidad y el equilibrio y la coordinación, además de las mejoras de tipo muscular que se pueden producir. Pero se debe de tener cuidado porque al saltar de un banco a otro se pueden tropezar o se pueden caer y golpearse con el banco o caer sobre algún compañero que en ese momento está pasando por debajo de los banco, por ello debemos de prestar especial atención en este elemento.

4. Espalderas con tobogán: las espalderas son un elemento muy útil ya que ofrecen muchas posibilidades de uso. Aquí lo que se pretende es que los niños suban y bajen por ellas para que mejoren la trepa, su coordinación para subir y que luego si quieres se deslicen por el tobogán. Para incentivar a los alumnos a que suban por las espalderas podemos colocar balones o pelotas encima de las espalderas para que vayan a cogerlos. Además, aquellos que no quieran bajar por el tobogán tienen la posibilidad de lanzarse al suelo para ir practicando las caídas, de modo que cada sujeto elegirá libremente la altura desde la que quiere saltar.

5. Aros colgados: Se colgaran aros a diferentes alturas y frente a ellos habrá un carro con pelotas o pelotas esparcidas por el suelo. Esto está colocado para que los niños practiquen el lanzamiento de precisión. Para que haya mayor variabilidad y diferentes niveles de dificultad los aros no solo están colocados a diferentes alturas sino que también los hay de diferentes tamaños.

6. “Modulo”: aquí se pueden realizar varias actividades. Una de ellas es simplemente subir, tarea que ya ayuda a que se desarrollen aspectos como el equilibrio o la fuerza. una vez arriba el sujeto puede optar por saltar a las colchonetas desde diferentes alturas con lo cual está mejorando la capacidad de caer de forma adecuada y de la forma más equilibrada posible. Pero también puede optar por realiza la voltereta hacia delante con lo cual estaría mejorando los giros en el eje transversal.

7. Plinto con diferentes alturas: este elemento tiene las mismas utilidades que el anterior. El alumno se puede subir en él y elegir la altura desde la que quiere saltar para practicar las caídas. En el primer escalón se colocará una colchoneta para aquellos que quieran realizar giros tanto en el eje transversal como en el eje longitudinal.

8. Cuerdas para trepa: es este lugar lo que pretendemos es que el sujeto realice trepas en las diferentes cuerdas. Una de las cuerdas es sin nudos y la otra con nudos para que haya variedad en la dificultad de la tarea. Por otro lado, también habrá colocada una escalera para aquellos que quieran subir y luego lanzarse a la colchoneta.

9. Paracaídas: Este elemento se puede utilizar para realizar muchas actividades. Se puede jugar haciendo movimientos al ritmo de la música, se pueden introducir pelotas de diferentes tamaños dentro e intentar sacarlas moviendo el paracaídas, se puede subir y bajar el paracaídas y que los niños vayan pasando por debajo, etc. En este elemento se hace necesario quizás la presencia del profesor para incitar un poco su utilización.

10. Canasta de baloncorf: esta se utiliza para realizar lanzamiento. Lo niños cogerán los balones en intentarán introducirlo por el aro. Pueden lanzar desde la distancia que ellos crean oportunos. Cada uno irá poniéndose retos cada vez mayores. Por otro lado, también pueden utilizar los balones para mejorar el bote o para llevarlos rodando o cualquier otra cosa.

11. Pelotas gigantes: se soltarán varias pelotas gigantes por el espacio con el fin de que los niños la cojan, la hagan rodar, intenten botarla, se intenten subir encima de ellas, rueden sobre ellas, etc. Con esto conseguimos varias cosas: mejorar el equilibrio, los transportes, los desplazamientos…

12. Pelotas de Rugby de foam: del mismo modo que las pelotas gigantes se soltaran balones de rugby con la intención de que los niños las golpeen con los pies o la intenten botar. Debido a su forma irregular los botes y las trayectorias de estos balones van a ser poco predecible y por tanto, los niños deben de ir ajustando continuamente su desplazamiento a dicha trayectoria lo cual va a generar una mayor coordinación y una mayor riqueza motriz.

13. “Balones colgante”: se colgarán balones a diferentes alturas con la intención de que los niños los golpeen con diferentes partes del cuerpo: con el pie, con la cabeza, con las manos, etc. Al esta colgados no solo mejorar los golpeos sino que al volverles la pelota tendrán que evitar que esta les golpee y para ello se tendrán que mover en función de la trayectoria que traiga el balón. Por tanto, les ayudará a mejorar la percepción. (Para colgar los balones lo que se puede hacer es introducirlos dentro de una bolsa y atar la cuerda a la bolsa).